Donald Trump estuvo en la corte este lunes para el inicio del juicio por fraude civil de $250 millones que fue presentado por la Oficina de la Fiscal General de Nueva York contra el expresidente, su empresa y dos de sus hijos, un caso que podría tener amplias implicaciones para la vida del expresidente.
En su declaración inicial, Kevin Wallace, de la Oficina de la Fiscal General, le dijo al juez que Trump y los funcionarios de su empresa habían participado en "actos ilegales persistentes" con estados financieros demasiado inflados con valores que fueron "determinados por Donald Trump".
Wallace señaló que Trump sobrevaluó sus estados financieros entre $812 millones y $2,200 millones, y sabía que eran falsos y los utilizó para obtener beneficios, incluidos préstamos en condiciones a las que no tenía derecho.
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Trump intentó culpar al exdirector financiero de la Organización Trump, Allen Weisselberg, por las certificaciones financieras en su declaración en el caso, según Wallace, que agregó que "estaba mintiendo".
Trump, que no estaba obligado a asistir al juicio, se sentó con los brazos cruzados durante la mayor parte de la presentación de Wallace. El juicio pone de relieve la perspicacia empresarial de Trump, ya que la Oficina de la Fiscal General buscará retratar al expresidente obsesionado con su imagen como un fraude que exageró intencionalmente sus éxitos.
El juicio civil inicia lo que podría ser una serie de comparecencias ante los tribunales de Trump, quien también enfrenta cargos penales en cuatro jurisdicciones diferentes, incluidos dos casos relacionados con su intento de anular las elecciones de 2020. Trump ha tratado de presentar todos sus problemas legales como un esfuerzo por impedirle regresar al poder y recibir represalias políticas mientras mantiene el liderazgo en las primarias republicanas.
LA RESPUESTA DEL ABOGADO DE TRUMP
El abogado de Trump, Christopher Kise, respondió en su declaración inicial que la evidencia mostraría que Trump "ganó muchos miles de millones de dólares teniendo razón en las inversiones inmobiliarias" y "construyendo uno de los imperios inmobiliarios más exitosos del mundo" y "una de las más exitosas marcas".
Kise le dijo al juez que las valoraciones son subjetivas y señaló que Trump nunca incumplió ninguno de los préstamos. "No hubo fraude", dijo Kise. "El presidente Trump no hizo ninguna declaración falsa".
Se espera que el juicio sin jurado en Manhattan dure unos tres meses y concluya el 22 de diciembre y será decidido por el juez Arthur Engoron.
Trump se dirigió a los medios reunidos fuera de la sala del tribunal cuando llegó al juicio a las 10:00 a.m. Atacó a la fiscal general del estado, Letitia James, y la acusó de presentar el caso para dañarlo políticamente.
"Están tratando de dañarme para que no me vaya tan bien como lo estoy haciendo", dijo Trump, quien actualmente es el favorito para la nominación presidencial republicana.
"Es una estafa. Es una farsa”, dijo Trump fuera del tribunal. Calificó el caso como "un intento de hacerme daño en una elección" y añadió: "No creo que la gente de este país vaya a tolerarlo".
Recientemente, el juez se puso del lado de la Oficina de la Fiscal General estatal, Letitia James, al determinar que Trump cometió repetidos actos de fraude durante años que incluyeron mentir a bancos y aseguradoras al sobrevaluar y subvaluar sus activos y exagerar su patrimonio neto en miles de millones de dólares.
Los argumentos de Trump para defender las declaraciones fraudulentas se basan en “un mundo de fantasía, no el mundo real”, escribió Engoron en un fallo de 35 páginas la semana pasada.
El fallo, que permitió que el caso fuera a juicio esta semana, también tendrá repercusiones prácticas para las numerosas compañías de responsabilidad limitada o LLC de Trump. La orden del juez puso en marcha un proceso de disolución para entidades como Trump Organization LLC, que ha ayudado a expandir la marca Trump a lo largo de los años.
Las cuestiones pendientes en el caso, más allá de lo que Engoron falló la semana pasada, se resolverán en el juicio.
El principal abogado de Trump en el caso, Christopher Kise, calificó el fallo de “escandaloso” y dijo que planeaba apelar. Trump ha menospreciado repetidamente a Engoron, incluso el domingo por la noche cuando lo llamó un “juez que odia a Trump, que es injusto, desquiciado y cruel en su BÚSQUEDA de mí” en una publicación en Truth Social.
Trump confirmó el domingo en Truth Social que estaría en la sala del tribunal para la apertura del juicio "para luchar por mi nombre y reputación". Se esperaba que asistiera a los dos primeros días del procedimiento.
James estuvo en la corte el lunes para el comienzo del juicio. Trump no la miró cuando entró, seguido por su hijo Eric. Antes de entrar, Trump pronunció comentarios en el pasillo en los que criticó directamente a James, llamándola "fiscal general corrupta".
"Todo era perfecto. No hubo ningún delito. El crimen es contra mí", dijo Trump en el tribunal, donde se encontraba Walt Nauta, su asistente y coacusado por cargos federales de mal manejo de documentos clasificados.
FISCAL JAMES: LA JUSTICIA APLICA SIN IMPORTAR "CUÁN RICO O PODEROSO SEAS"
La fiscal James emitió un comunicado el lunes en la mañana antes de llegar a la corte en donde resaltó como espera demostrar el fraude deTrump y que la justicia se aplica de igual manera a todos sin importar "cuán rico o poderoso seas".
“Durante años, Donald Trump infló falsamente su patrimonio neto para enriquecerse y engañar al sistema. Ganamos los fundamentos de nuestro caso la semana pasada y demostramos que su supuesto patrimonio neto se debe desde hace mucho tiempo a un fraude increíble", dijo James en su declaración.
"En este país, este tipo de fraude persistente tiene consecuencias, y esperamos demostrar el alcance total de su fraude e ilegalidad durante el juicio. No importa cuán rico o poderoso seas, no existen dos conjuntos de leyes para la gente en este país. El estado de derecho debe aplicarse por igual a todos, y es mi responsabilidad asegurarme de que así sea”.
De camino a la corte, dijo a los periodistas que "nadie está por encima de la ley. Y es mi responsabilidad, mi deber y mi trabajo hacerla cumplir".
Trump y tres de sus hijos, Don Jr. y Eric, quienes se desempeñan como altos ejecutivos en la Organización Trump, y su hija, Ivanka Trump, se encuentran entre los 28 testigos que los fiscales planean llamar.
Allen Weisselberg, exdirector financiero de la compañía, también subirá al estrado, además de Michael Cohen, exabogado de Trump.
En un juicio penal el año pasado, Weisselberg testificó contra la Organización Trump y fue sentenciado a cinco meses de cárcel en relación con su papel en el plan de fraude fiscal de 15 años de la empresa. La Organización Trump fue condenada por 17 cargos relacionados con conspiración, fraude fiscal criminal y falsificación de registros comerciales y recibió multas de $1.6 millones.
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