NACIONES UNIDAS - El presidente Joe Biden dijo ante la Asamblea General de las Naciones Unidas que Estados Unidos seguirá dando apoyo militar y económico a Ucrania, a la vez que denunció a Putin por "violar" la Carta de la ONU, el tratado fundador de la organización.
Biden se centró en la guerra en Ucrania luego de que en las últimas semanas las tropas de Kiev retomaron el control de grandes franjas de territorio cerca de Kharkiv, que habían sido capturadas por Moscú al inicio de un conflicto que dura ya siete meses.
"Si una nación puede ir en busca de sus ambiciones imperiales sin consecuencias estamos comprometiendo todos los principios de esta institución", dijo Biden en parte de su discurso.
"Estados Unidos quiere el fin de esta guerra, en términos justos. No se puede tomar por la fuerza el territorio de otro país. El único país que se interpone a esto es Rusia", agregó el mandatario.
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Pero pese a las victorias ucranianas en el campo de batalla, gran parte de Europa siente el impacto doloroso de las sanciones decretadas contra Rusia en respuesta a la invasión de su país vecino.
En la Casa Blanca preocupa cada vez más que Putin pueda intensificar el conflicto tras los reveses recientes. En una entrevista con el programa “60 Minutes” de la televisora CBS que se emitió el domingo, Biden advirtió a su homólogo que desplegar armas nucleares o químicas en Ucrania recibiría una respuesta “consecuente” de EEUU.
"Se han visto las peores atrocidades, tumbas masivas, cadáveres con indicios de tortura. Esta guerra trata de extinguir el derecho de Ucrania a existir como estado soberano, a existir como pueblo. Esto es algo escalofriante", agregó Biden.
La visita de Biden a la ONU se produce también en un momento de aparente estancamiento en los esfuerzos de su gobierno por revivir el histórico pacto nuclear alcanzado con Irán en 2015. El acuerdo — forjado por el expresidente Barack Obama, y abandonado por su sucesor, Donald Trump, en 2018 — supuso un alivio de miles de millones de dólares en sanciones a cambio del compromiso de Teherán a desmantelar gran parte de su programa nuclear y abrir sus instalaciones a inspecciones internacionales.
Se trata de la primera asamblea de la ONU totalmente presencial desde el inicio de la pandemia del coronavirus.
LA GUERRA EN UCRANIA, TEMA CENTRAL DE LA ASAMBLEA
También tenía pautado dar su discurso el líder de Irán, Ebrahim Raisi. El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, cuya nación está en guerra con Rusia, será visto y oído, pero no estará físicamente en la sede de la ONU.
La asamblea de 193 miembros aprobó recientemente que Zelenskyy ofrezca un discurso pregrabado por la continua necesidad de hacer frente a la invasión rusa, una excepción al requisito de que todos los líderes deben intervenir en persona. El presidente de Rusia, Vladimir Putin, no asistió al encuentro anual de líderes.
Como era de esperar, Ucrania ha sido el centro de atención en la asamblea y, un líder tras otro, condenaron a Rusia por su ataque a una nación soberana. La guerra, que ha se ha cobrado ya la vida de miles de personas, está elevando el precio de los alimentos en todo el mundo así como el costo de la energía, algo que preocupa especialmente ante la cercanía del invierno en el hemisferio norte. Además, ha avivado el temor a una catástrofe en la mayor central nuclear de Europa, ubicada en el sureste del país, que ahora está ocupado por las tropas rusas.
Los líderes de muchos países están tratando de evitar la expansión del conflicto y restablecer la paz en Europa. Los diplomáticos, sin embargo, no esperan avances en la cumbre de esta semana en la sede de la ONU, donde casi 150 líderes se dirigirán a sus homólogos y al mundo.