WASHINGTON - La Cámara de Representantes aprobó el martes una resolución en la que solicita formalmente al vicepresidente, Mike Pence, y al gabinete que invoquen la Enmienda 25 de la Constitución para destituir al presidente saliente, Donald Trump, contra el que ahora se prepara a impulsar un nuevo juicio político.
En una sesión celebrada seis días después de que seguidores de Trump arremetieran contra el Capitolio en Washington, donde murieron cinco personas, los congresistas aprobaron por 223 votos favor y 205 en contra la iniciativa.
En la resolución, no vinculante, los congresistas piden a Pence declarar a Trump "incapaz de ejecutar los deberes de su cargo y de ejercer inmediatamente los poderes como presidente en funciones".
Sin embargo, la votación se convirtió en un mero trámite ante la negativa del segundo a bordo de la Administración Trump a avanzar en esa dirección.
Pence se anticipó a la votación al difundir horas antes una carta dirigida a la presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi, en la que llama a "evitar acciones que dividirían e inflamarían aún más las pasiones del momento".
"NO CEDERÉ"
"No creo que tal curso de acción sea en el mejor interés de nuestra Nación o sea consistente con nuestra Constitución", señaló el vicepresidente sobre el mecanismo promovido por los progresistas cuando faltan ocho días para que concluya el mandato de Trump.
"La semana pasada -enfatizó Pence-, no cedí a la presión para ejercer más allá de mi autoridad constitucional para determinar el resultado de las elecciones y ahora no cederé a los esfuerzos de la Cámara de Representantes para jugar juegos políticos en un momento tan serio en la vida de nuestra nación".
El vicepresidente hizo así una tácita alusión a las presiones de Trump para que se arrogara unos poderes que no le correspondían bajo la Constitución e interfiriera la sesión de ambas cámaras del Congreso convocada para certificar la victoria de Joe Biden en los comicios de noviembre pasado.
El diario The New York Times reveló el martes parte de una conversación telefónica que Trump sostuvo el miércoles pasado con Pence, en un último intento por convencerlo para que revirtiera el resultado de las elecciones.
"Puedes pasar a la historia como un patriota", le dijo Trump a Pence, de acuerdo con la versión del diario neoyorquino, que citó los testimonios de dos personas informadas sobre la conversación.
En su carta, Pence advirtió que usar esa enmienda "sentaría un terrible precedente" y se comprometió a asegurar "una transición ordenada del poder".
TRUMP VE "CERO RIESGO" DE DESTITUCIÓN
Durante la jornada, Trump rompió su silencio y en las primeras declaraciones a la prensa después de lo ocurrido en el Legislativo defendió como "totalmente apropiada" su arenga para que sus seguidores marcharan hacia el Capitolio.
"Si lees el discurso (...) la gente pensó que lo que dije fue totalmente apropiado", afirmó el mandatario.
Ya en Texas, adonde se desplazó para inspeccionar los avances en la construcción del muro en la frontera con México, el presidente aseguró que hay "cero riesgo" de que su gabinete lo destituya.
"La Enmienda 25 supone cero riesgo para mí, pero le pasará factura a Joe Biden y su Administración. Como dice la expresión, ten cuidado con lo que deseas", afirmó Trump, sin aclarar a qué se refería, dado que el presidente electo no ha llegado a pedir explícitamente que se active ese mecanismo.
Trump calificó además la apertura del segundo juicio político en su contra como algo "absolutamente ridículo" y "una continuación de la mayor caza de brujas de la historia de la política".
NUEVO JUICIO
Los demócratas buscarán este miércoles acusar al mandatario del cargo de "incitación a la insurrección", un esfuerzo que ha conseguido el respaldo de al menos cuatro legisladores republicanos: Adam Kizinger, congresista de Illinois; Liz Cheney, congresista de Wyoming; John Katko, congresista de Nueva York; y Fred Upton, congresista por Michigan.
The New York Times desveló igualmente que el líder republicano del Senado, Mitch McConnell, se mostró satisfecho por un posible juicio político contra Trump y que cree que una posible destitución podrá ayudar a purgar su partido de seguidores del actual presidente.
El proceso iniciado el lunes en la Cámara Baja promete obligar al Senado a someter a Trump a un juicio político que se desarrollará cuando Biden ya esté en el poder, y que por tanto no tendrá como principal objetivo la destitución del mandatario sino su posible inhabilitación para ejercer futuros cargos políticos.