WILMINGTON, Delaware — El presidente electo Joe Biden advirtió el lunes que el gobierno del presidente Donald Trump le ha causado un daño enorme al sistema de seguridad nacional, y denunció “barreras” en la comunicación entre funcionarios de agencias y su equipo de transición que podrían socavar la seguridad de los estadounidenses.
Durante un discurso en Wilmington, Delaware, Biden aseveró que su equipo ha enfrentado “obstrucción” de parte del “liderazgo político” en el Departamento de Defensa y la Oficina de Administración y Presupuesto en su intento por reunir la información necesaria para continuar con la transición de poder.
“Por ahora, simplemente no estamos recibiendo toda la información que necesitamos del gobierno saliente en áreas clave de seguridad nacional. En mi opinión, es nada menos que irresponsabilidad”, dijo Biden.
Advirtió que su equipo necesita “visibilidad total” del proceso presupuestario en el Departamento de Defensa “para evitar cualquier posibilidad de confusión o de tener que ponerse al día que nuestros adversarios pudieran intentar aprovechar”. Dijo también que él y su equipo necesitan “una imagen clara de la posición de nuestras fuerzas en todo el mundo y de nuestras operaciones para disuadir a nuestros enemigos”.
Biden hizo los comentarios después de recibir información de miembros de sus equipos de seguridad nacional y de defensa, incluidos sus nominados para secretarios de Estado, Defensa y Seguridad Nacional, así como su próximo asesor en seguridad nacional.
El presidente electo dijo que su equipo halló que agencias “cruciales a nuestra seguridad han sufrido un daño enorme” durante la presidencia de Trump.
“Muchas de ellas han sido vaciadas de personal, capacidad y moral”, comentó. “Todo esto le dificulta a nuestro gobierno proteger al pueblo estadounidense, defender nuestros intereses vitales en un mundo en el que las amenazas están evolucionando constantemente y nuestros adversarios están adaptándose constantemente”.
Trump sigue sin reconocer que perdió las elecciones por más de 7 millones de votos, y no fue sino hasta el 23 de noviembre, semanas después de las elecciones, que su gobierno autorizó la cooperación oficial con el equipo de transición de Biden. En aquel momento, el presidente electo y sus asistentes advirtieron que la demora estaba obstaculizando su capacidad para desarrollar su propio plan de vacunación, pero desde entonces han dicho que la cooperación en ese y otros temas relacionados con el COVID-19 ha mejorado.
Sin embargo, la semana pasada el mismo Biden dijo que el Departamento de Defensa “ni siquiera nos informa de muchas cosas” e insinuó que, debido a ello, no tenía una comprensión total del alcance real del reciente ciberataque a varios sistemas del gobierno.
Biden dijo el lunes que su equipo aún está recopilando información acerca de la magnitud del ciberataque. Indicó que es necesario “modernizar” la defensa de Estados Unidos para disuadir ese tipo de ataques en el futuro, “en lugar de seguir invirtiendo excesivamente en sistemas anticuados diseñados para hacer frente a las amenazas del pasado”.
Funcionarios del Pentágono rechazaron la descripción de Biden sobre la desconexión entre el Departamento de Defensa y el equipo del presidente electo. El secretario de Defensa interino, Christopher Miller, dijo en un comunicado que el departamento ha realizado 164 entrevistas con más de 400 funcionarios, y ha entregado más de 5.000 páginas de documentos, que es “mucho más de lo que el equipo de transición de Biden solicitó en un principio”.
Miller dijo también que su equipo continúa programando reuniones para el resto de las semanas de la transición y “responder a cualquiera y todas las solicitudes de información en lo que nos compete”.
Biden también habló ampliamente sobre la necesidad de reconstruir alianzas globales, que dijo eran necesarias para combatir el cambio climático, atender la pandemia del COVID-19 y prepararse para epidemias futuras, y confrontar la creciente amenaza que representa China.
“En este momento hay un vacío enorme. Vamos a tener que recuperar la confianza de un mundo que ha comenzado a hallar formas de evitar que le estorbemos al trabajar o a hacerlo sin nosotros”, afirmó.
Trump implementó una política exterior de “Estados Unidos primero” en la que el país redujo su participación o se retiró de añejas alianzas y tratados globales. Su gobierno le recortó el financiamiento a la OTAN y se retiró de la Organización Mundial de la Salud y del Acuerdo de París contra el cambio climático.