A un año de la llegada del primer bus con migrantes desde Texas, aún son cientos los que afirman vivir en precariedad. Más aquí.
A un año de la llegada del primer autobus con migrantes desde Texas, al menos 1,500 han hecho del área de Washington DC su nuevo hogar, según la organización Santuario DMV.
Aunque la selva que muchos atravesaron para llegar aquí es ahora un mal recuerdo, su nueva vida sigue llena de desafíos. Este es el caso de Francis Rivera quien vive junto a su esposo y tres hijos en un hotel que ha servido de refugio a otras familiar indocumentadas.
“Lo que uno quiere es poder independizarse para uno poder salir de acá. No nos gusta, el espacio es muy reducido para nosotros cinco y queremos buscar algo donde estar mas estable", destacó.
Ni Rivera ni su esposo tienen permiso de trabajo o un identificación de DC y eso, asegura, les dificulta el proceso de obtener empleo y alquilar una vivienda.
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“Necesitamos como que mucha más orientación y mucha más ayuda para poder nosotros independizarnos, para poder sacar los documentos", enfatizó.
Desde abril del año pasado, 7,000 migrantes han sido transportados al DMV en 200 autobuses, según la Santuario DMV. De hecho, aún siguen llegando familiar por sus propios medios.
La ciudad respondió a esa probada de la crisis migratoria brindado refugio, comida y acceso a la salud a cientos de personas. En julio, comenzaron a albergar a los migrantes en hoteles y eso se mantiene hasta hoy.
“Tampoco quiero hacer una carga para el gobierno. Quiero pagar impuestos, conseguir un trabajo estable", expresó, por su parte, Eliexander López.
En septiembre el Concejo de DC pasó una legislación con la que se creó la Oficina de Servicios para Migrantes que fue enmendada la semana pasada. Ambas normas pavimentan el camino para ofrecer ayuda en salud, documentación y acceso a refugios de emergencia para estas familias.
Sin embargo, la entidad argumentó en declaraciones escritas que esto no satisface todas las necesidades de los indocumentados a largo plazo.
“El apoyo a largo plazo sigue siendo insuficiente, ya que el presupuesto de la alcaldesa Bowser para el año fiscal 2024 no contiene apoyo para la Oficina de Servicios a Migrantes y hace profundos recortes en la vivienda y los servicios humanos", concluyó Santuario DMV.
