Es posible que los trenes no estén recibiendo las inspecciones de seguridad adecuadas antes de llegar a las vías, según una auditoría realizada por el organismo de control de seguridad de Metro.
La Comisión de Seguridad del Metrorail de Washington acaba de publicar el informe.
"Esto incluye ejemplos como que los estábamos viendo realizar lo que se llama una inspección diaria, en la que revisan los trenes antes de salir todos los días", detalló Max Smith de la comisión de seguridad. “Eso incluye algunos controles operativos y de seguridad. No estaban haciendo todos los pasos. No estaban siguiendo esos pasos en orden. Estaban utilizando un procedimiento obsoleto”.
Otros hallazgos incluyen que algunas mediciones sobre ruedas no se estaban realizando correctamente porque solo estaba presente una persona en lugar de las dos requeridas.
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Metro no realiza un seguimiento de la vida útil de las piezas que podrían deteriorarse con el tiempo. Y algunas herramientas que Metro utiliza para mantener los vagones no están calibradas adecuadamente.
"Hay pasos iniciales en el camino que mejoran esa seguridad a partir de ahora y luego en el futuro", Smith.
Dijo que si se encontrara algún problema de seguridad urgente, se recomendaría retirar los vagones del servicio, lo cual no ha sido necesario.
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El objetivo de dichas auditorías es asegurarse de que Metro termine haciendo lo correcto.
Hay algunos aspectos positivos que informar, específicamente con los vagones de la serie 7000 con problemas, que ahora se encuentran bajo un plan adecuado para abordar los problemas de las ruedas que causaron un descarrilamiento en 2021, según esta auditoría.
Metro afirmó que está revisando el informe.
