
Se espera que la decisión de la administración Trump de recortar dos programas federales que proporcionaron más de $1,000 millones en fondos afecte drásticamente a los necesitados en D.C., especialmente a las escuelas y los bancos de alimentos que compran alimentos de las granjas locales.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos recortó $500 millones en entregas de alimentos, y el impacto está afectando a personas de todo el país.
"Muchas veces, he necesitado comida para sobrevivir día a día, y estas despensas de alimentos son vitales para muchos, muchos como yo, nuestra supervivencia durante todo el día y durante toda la semana", dijo Steve Hill, cliente del banco de alimentos.
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Se espera que el recorte afecte a un gran número de personas en el Distrito.
Una de cada tres personas se enfrenta a la inseguridad alimentaria en toda la región, según Radha Muthiah, directora ejecutiva del Banco de Alimentos del Área de la Capital.
"Estos son nuestros vecinos, estas son personas con las que podrías sentarte en el mismo Metrovag, estas son familias con las que tus hijos van a la escuela, estos son vecinos en tu cuadra", dijo. "Hay más de un millón de personas en nuestra región que necesitaron apoyo del banco de alimentos".
El Banco de Alimentos del Área de la Capital dijo que en un año determinado, entre un cuarto y un tercio de los alimentos que proporcionan a los necesitados provienen de los programas del USDA.
"Anticipamos, por ejemplo, que otros 55 camiones cargados de alimentos llegarán a través de uno de los programas que se han visto afectados, y hasta ahora hemos escuchado que es probable que la mitad de esos camiones no lleguen. Están etiquetados como 'devueltos'", dijo Muthiah. "Entonces, si ese es el caso, son 670,000 comidas en comestibles que ahora tenemos que cambiar y buscar otras fuentes".
Para mantenerse al día con la demanda, el Banco de Alimentos del Área de la Capital deberá actuar rápidamente y recurrir a otras fuentes para cerrar esa brecha, incluidos los patrocinadores financieros y los minoristas para aumentar los fondos y las donaciones.
Es un cambio rápido al que muchos bancos de alimentos de todo el país tendrán que adaptarse, lo que afectará a los necesitados de todo el país.
"Me encantaría ver a uno de los que están haciendo el corte estar en la posición de perder todo lo que tiene y llegar a una posición en la que tenga que usar una despensa de alimentos. Sería increíble verlo", dijo Hill. "Entonces entenderían por qué estos programas son tan vitales, tan importantes".