Una madre de Virginia fue declarada culpable de asesinato tras dispararle a sus dos hijas en 2018.
Los fiscales dijeron que Veronica Youngblood le disparó a Brooklynn, 5 años y Sharon, 15 años, en el apartamento que compartían en McLean días antes de que Brooklynn se mudara a vivir con su padre.
Sharon estaba viva cuando llegó la policía, y ese oficial testificó en el juicio.
“Ella dijo que su mamá entró al cuarto y dijo, ‘Te voy a llevar a ver a Dios’, y después le disparó”, afirmó el oficial.
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Youngblood fue arrestada tras llamar a su exesposo y dejarle un correo de voz confesando y diciéndole que lo odiaba.
Youngblood habló sobre su plan de comprar una pistola y luego matar a sus hijas y a si misma en una entrevista con las autoridades poco después del tiroteo.
La defensa pintó al padre como una persona abusiva y controladora y parte de la razón por la cual Youngblood cayó en un grave trastorno depresivo.
Un doctor describió la psicosis depresiva de Youngblood, que según ella le causaba escuchar voces que le decían que matara a sus hijas y que se quitara la vida.
Al jurado le tocó decidir si la madre estaba legalmente demente en el momento en que disparó. La declararon culpable de ambos cargos de asesinato y ambos cargos de usar un arma de fuego para cometer un asesinato.
El jurado dictará la sentencia el jueves a las 10 a.m.
