Una mujer de Virginia está pidiendo ayuda y advierte a otras familias mientras lidia con las crecientes facturas médicas de su esposo después de que fue atropellado por una camioneta mientras trabajaba como voluntario en Perú.
Durante los últimos siete meses, Emily Van de Ven ha tenido que pagar de su bolsillo el cuidado de su esposo, pero ahora se está quedando sin dinero y sin opciones.
“Lleno de vida, lleno de energía, tan activo, verlo como, simplemente desperdiciándose hasta la nada, es desgarrador”, reconoció Van de Ven en una entrevista con nuestra cadena hermana, NBC4.
La pareja había sido voluntaria en un orfanato en Lima, Perú, cuando Benjamin Jung, de 43 años, fue atropellado por un vehículo todoterreno en febrero.
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El accidente fue tan grave que apenas sobrevivió.
“Nunca recuperó la conciencia del accidente. Estaba en coma. Tenía politraumatismos: traumas en todo el cuerpo, huesos rotos”, detalló Van de Ven. “Tenía todas las costillas rotas. Tuvo que ser puesto en ventilación mecánica. Estaba con soporte vital, lesión grave en la cabeza”.
Jung ha estado en estado vegetativo desde el accidente. Van de Ven sostuvo que eso fue solo el comienzo de su terrible experiencia.
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A pesar de tener pólizas de seguro médico y de viaje, tuvo que pagar de su bolsillo más de $250,000 por el tratamiento médico de su esposo.
En países como Perú, los pacientes deben pagar por adelantado y proporcionar los suministros para recibir el tratamiento.
“Tuvo que someterse a una traqueotomía de emergencia, y no quisieron hacer la cirugía durante dos días porque tuvimos que proporcionar el equipo de traqueotomía”, detalló.
Para poder financiar todo esto, Van de Ven vació sus cuentas, agotó todas sus tarjetas de crédito y su casa va a ser embargada.
Y debido a que nunca adquirió un poder notarial, no puede vender ningún activo a su nombre.
“Es algo en lo que nunca piensas”, destacó. “No sabía que necesitaba esto. Pensé que como esposa solo tengo derechos automáticos”.
Van de Ven también sostuvo que Jung ha mostrado algunos signos de mejoría, pero aún está demasiado débil para regresar a Estados Unidos, lo que costaría más de $75,000.
Con el dinero y las opciones agotándose, comenzó una recaudación de fondos en línea para ayudar a cubrir los costos, y está buscando cualquier ayuda legal que pueda obtener.
“Simplemente hice todo lo que pude para salvar su vida porque si no pago, morirá”, recalcó.
Van de Ven compartió con NBC4 cómo conoció a su esposo. Se conocieron hace 22 años en una clase de teoría musical en la universidad y han estado casados durante 17 años.
Ella espera que su historia toque la fibra sensible de las personas adecuadas, para que puedan obtener la ayuda que necesitan.
“Eso es lo único que me mantiene en marcha porque es abrumador, y luego saber que si no continúo, nadie lo cuidará”, aseveró. “No hay elección. Y cuando tu espalda está contra la pared, sabes, tienes la opción de hundirte o nadar, y ahí es donde estoy”.