MÉXICO - El avión de la fuerza aérea pasó debajo de un arco formado con dos chorros de agua como parte de la ceremonia de inauguración de una de las pistas del nuevo aeropuerto de Ciudad de México, ubicado en la Base Militar 1 de Santa Lucía.
De la aeronave descendió el presidente Andrés Manuel López Obrador usando un cubrebocas que de inmediató se quitó.
"Es el aeropuerto más importante que se está construyendo en el mundo", aseguró.
Explicó que con la infraestructura de la base aérea militar que este día pusieron en funcionamiento, se terminó la primera fase del proyecto, el cual sustituye al aeropuerto que comenzó a edificarse en Texcoco en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
"Nos estamos ahorrando 225,000 millones de pesos", insiste frente a críticas que argumentan que no es así.
Según el plan, en estos terrenos del Estado de México funcionarán 3 pistas de despegue y aterrizaje, las cuales formarán con las terminales de la Ciudad de México y de Toluca el nuevo sistema aeroportuario.
Por ahora solo han quedado edificados las estructuras militares, pero se espera que para marzo del 2022 se concluya y se abra el nuevo aeropuerto Felipe Ángeles.
Como muchos, Enrique Fernández aplaudió que el tan anunciado complejo empiece a funcionar.
"Traerá consigo el progreso del país", considera Fernández.
Aunque otros, como Karla Ayala, no creen que haya sido una buena idea.
"Se hizo demasiado rápido, ni siquiera creo que sea seguro. Las vías de acceso se me hacen pésimas", afirma Ayala.
Mientras para expertos, como el maestro y analista político Rubén Monroy, este evento tuvo más un carácter simbólico que real.
"Significa que tiene el control, que cumple sus promesas, aunque se esté inaugurando una pista y el aeropuerto esté muy lejos de funcionar", explica Monroy.
Por lo pronto, este miércoles un grupo de aviones comerciales también se unieron al estreno.
