BRASIL— Inah Canabarro Lucas, una monja brasileña de casi 117 años, es ahora la persona viva más anciana del mundo tras la muerte de una mujer japonesa que poseía anteriormente el título.
El título de Canabarro como la persona viva más anciana fue confirmado por LongeviQuest, una organización que rastrea supercentenarios en todo el mundo, tras validar sus registros de vida. El Guinness World Records también confirmó el título.
Tomiko Itooka, una mujer japonesa que anteriormente ostentaba el título de persona viva de mayor edad, falleció el 29 de diciembre en el centro de Japón a la edad de 116 años.
Canabarro, quien también es la segunda monja más anciana de la historia, nació en São Francisco de Assis, Rio Grande do Sul, Brasil, el 8 de junio de 1908 a sus padres Joao Antonio Lucas y Mariana Canabarro Lucas. Sin embargo, su sobrino declaró a The Associated Press que su nacimiento se registró con dos semanas de retraso y que en realidad nació el 27 de mayo.
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Es bisnieta del general David Canbarro, un famoso general brasileño que fue uno de los líderes de la Guerra de los Traperos, ocurrida durante el turbulento periodo que siguió a la independencia de Brasil de Portugal en el siglo XIX.
A los 16 años, comenzó su formación religiosa a través de sus estudios en un colegio de Rio Grande do Sul, antes de mudarse a Montevideo, Uruguay, donde fue confirmada en la Iglesia Católica a los 21 años. Dos años después, encontró un amor por la enseñanza que la llevaría de vuelta a sus raíces brasileñas para enseñar portugués y matemáticas en una escuela local de Río de Janiero. Su carrera docente duraría décadas antes de su jubilación en 1980.
Su carrera como profesora no la apartó de su religión: a los 26 años emitió los votos perpetuos y se hizo monja.
Al celebrar su 110 cumpleaños, Canabarro recibió una bendición apostólica del Papa Francisco, así como una certificación de la bendición, que se exhibe en el rincón de recuerdos de la comunidad donde reside.
Aparte de su devoción a la religión y a la enseñanza, Canabarro también es una apasionada aficionada del fútbol.
Como fiel seguidora del Sport Club Internacional, explica que eligió este club porque representa al pueblo.
"No importa si es rico o pobre, es para el pueblo", la monja le dijo a LongeviQuest.
El club de fútbol local celebra cada año el cumpleaños de su hincha de más edad. Su habitación está decorada con regalos con los colores rojo y blanco del equipo, según contó su sobrino a The Associated Press.
"Blanco o negro, rico o pobre, seas quien seas, el Inter es el equipo del pueblo", dijo Canabarro.
¿El secreto de su longevidad? La monja, que está en silla de ruedas, le da crédito a Dios diciendo que él la ha ayudado a vivir todos estos años.
"Él es el secreto de la vida. Él es el secreto de todo", dijo a la organización.